Chile lidera en inteligencia artificial en América Latina
Según un estudio de la CEPAL en conjunto con CENIA, este año 2025 Chile se posiciona por tercer año consecutivo como el país más avanzado de Latinoamérica en preparación para la inteligencia artificial.
¿Qué mide este ranking?
El índice desarrollado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) junto al Centro Nacional de Inteligencia Artificial de Chile (CENIA) evalúa la preparación de los países de la región en cuanto a adopción, desarrollo e implementación responsable de la inteligencia artificial.
El estudio considera 11 dimensiones clave, agrupadas en cuatro áreas principales:
- Infraestructura digital y datos
- Capital humano
- Gobernanza y regulación
- Innovación y ecosistemas de investigación
A diferencia de otros índices internacionales, este análisis está contextualizado para América Latina, considerando sus desafíos estructurales, brechas sociales y condiciones institucionales particulares.
Chile en el puesto n.º 1
Con un puntaje de 70,5 puntos sobre 100, Chile encabeza el ranking general.
El informe destaca particularmente:
- Su ecosistema de innovación en crecimiento
- La conectividad digital y cobertura de infraestructura
- Las políticas públicas orientadas al desarrollo de tecnologías emergentes
- El rol de instituciones como CENIA, que promueven la investigación y formación en IA
¿Cómo se posicionan los demás países?
El ranking quedó así:
- Chile (70,5 pts)
- Brasil (67,3 pts)
- Uruguay (62,3 pts)
- Colombia (55,8 pts)
- Costa Rica (53,8 pts)
¿Qué implica esto para el futuro profesional?
Los datos sugieren que el avance en IA no será solo técnico, sino también cultural y formativo.
La demanda por habilidades relacionadas con IA —ya sea en programación, análisis de datos o redacción asistida— crecerá significativamente en los próximos años. Los países que inviertan en educación aplicada, no solo en infraestructura, marcarán la diferencia.
El liderazgo de Chile en inteligencia artificial no es casualidad: responde a un trabajo conjunto entre Estado, academia y sector privado.
Sin embargo, este liderazgo también exige acción: formar profesionales, garantizar acceso equitativo a estas tecnologías y fomentar un uso ético y útil de la IA en todas las industrias.
En Chile, los datos indican que vamos un paso adelante. Pero aún queda camino por recorrer.